El libro donde la tragedia se encuentra con la eternidad.

1.  Creo en Dios y además creo y me dedico a la ciencia. Muchos ven esto como una completa contradicción, pero para mí la ciencia es una forma de descubrir la gracia de Dios en todo aquello que me rodea y éste libro me lo confirmó. No hay nada más sublime (Para mí) que perseguir la ciencia de la mano de Dios. 
2. Como ya dije: Creo en Dios, pero soy una creyente que NO practica ningún tipo de religión ¿Muy loco, verdad? Pues no, algo que mi tío me ha ido enseñando en todo el tiempo que he estado yendo a su iglesia, es que una de las razones por las cuales Jesús vino al mundo, fue a abolir las religiones, acabar con la religiosidad y predicar las buenas nuevas de Dios y éste libro me lo volvió a confirmar... Jesús no es afecto a las religiones, ni a las instituciones.

Bien... Ya les hable un poco sobre mis ideologías, tiendo a ser muy reservada con éste tema incluso con las personas a las que más conozco, pero me parece acertado que conozcan esa parte de mí a través de este post especial. Pueden estar o no de acuerdo conmigo y eso está muy bien para mí.

Tú, el que está leyendo ésto, eres libre de creer en lo que quieras, eres libre de seguir una ideología en específico o incluso no creer en nada, sólo quiero que sepas que RESPETO TU OPINIÓN Y TU FORMA DE PENSAR, pero éste estilo de vida funciona para mí y además me hace feliz.

Ahora hablemos un poco de la historia, sus personajes, la trama y su preciosa ambientación. 

Todo comienza en un viaje hermoso que a Mack (personaje principal) se le ocurre a finales de verano para compartir con sus tres hijos menores en una reserva natural en la ciudad de Joseph en el estado de Oregon, mientras su preciosa y paciente esposa, llamada Nan, se va una conferencia importante en el hospital que trabaja (Nan es enfermera, por cierto) Todo marchó muy bien los primeros días y cuando Mack creía que su vida ya no podía ser mejor, la última mañana que estuvieron en el campeto la tragedia ocurrió... Alguien raptó a Missy, la menor de sus cinco hijos, y un par de días después se descubrió que la niña fue terriblemente asesinada en una cabaña en la profundidad de un bosque de la reserva, su cuerpo nunca fue hallado y la policía llegó a la conclusión de que el homocida era un asesino serial que secuestraba a niñas pequeñas y dejaba en la escena del crimen un prendedor en forma de mariquita (En el libro no dice mariquita pero no recuerdo cual es el verdadero nombre del insecto)

No es precisamente la imágen más nítida, pero es un fragmento de la película donde se ve la mágica unión que había entre Mack y su pequeña Missy.

Después de ese terrible acontecimiento, pasan cuatro años, Mack se queda sólo en casa un día de invierno y recibe una nota proveniente de "Papá", así es como Nan y los niños se referían a Dios, donde decía que estaría en la cabaña el próximo fin de semana y que le encantaría verlo. Al principio el pobre hombre creyó que se trataba de una broma, pero no pudo contenerse y se aventuró a ir de nuevo al epicentro de su "Gran Tristeza" (Es así como Mack llama a la depresión con la que vive desde que Missy murió)

En la cabaña es donde se desarrolla el resto de la historia. Es un lugar tan vivo como los persojes que allí se encuentran... Hay un lago, hay flores silvestres, frutas exóticas, arómas peculiares, animales, paz y además parece ser una tierra en la que la primavera, el clima cálido y las noches frescas se fusionaran creando el perfecto paraíso. Mack llega y se encuentra con tres personas, quienes afirman ser Dios. La primera persona a la que ve se presenta ante él como Jesús, éste es descrito en el libro como un hombre con razgos árabes, sin mucho atractivo físico pero con un carisma enorme. Luego Mack conoce a Papá (Dios padre, Jehova, etc) pero papá es nada más y nada menos que una mujer robusta, afroamericana, sonriente y que además se llama Elousia (Cuyo significado les dejaré más adelante y sí, también sale en el libro) y por último Mack conoce a una mujer de procedencia asiatica llamada Sarayu, quien conoceremos en la historia como el espíritu santo y quien Mack describe como una presencia etérea, como rayos de luz, de colores, una fuente de aromas, algo para nada humano, pero sumamente hermoso.